- 1 sepia fresca y limpia
- ½ Kg de patatas blancas.
- 1 cebolla
- 2 ajos
- 1 guindilla cayena
- 1 hoja de laurel
- 2 tomates medianos
- 1 pimiento choricero
- 1 cucharadita de pimentón
- 12 almendras peladas
- 1 rama de perejil
- Comino en polvo
- azafrán
- 3 cucharadas de Aceite de Oliva Virgen
- 1 rama de tomillo (infusión)
- 1 fumet o caldo de pescado
Elaboración
Pelamos las patatas y reservamos.
Habremos hecho previamente el
fumet de pescado, y procedemos a hacer una infusión con el caldo y la rama de
tomillo, para esto calentamos el fumet y echamos el tomillo, manteniendo sin
hervir durante unos diez minutos, finalizado el tiempo sacamos el tomillo.
En una olla, incorporamos el
aceite a fuego medio y cuanto este caliente añadimos la cebolla picada en brunoise
(trozos pequeños), y pasados unos 4 minutos añadimos el ajo picado, y
continuamos con el sofrito.
Cuando esté listo, incorporamos el
pimentón teniendo cuidado de que no se queme (si no amargaría y se iría al
traste la receta), y a continuación añadimos el tomate picado o triturado, según
nuestro gusto y esperamos a que pierda completamente el agua. (no hacer a fuego
fuerte).
Mientras se hace el sofrito,
procedemos a limpiar y picar la sepia. Por un lado, picaremos las patas, las
aletas y las puntas del cuerpo de la sepia. Chascamos las patatas. Incorporamos
al sofrito las patatas y las partes de la sepia que ya hemos cortado, si ya ha
evaporado toda el agua de la sepia. Removemos y añadimos el fumet de pescado,
cociendo durante unos veinte minutos.
Con el cuerpo de la sepia hacemos
tiras de unos 5 cm de ancho, y por la parte interior vamos a marcar las tiras
de sepia (marcas es hacer cortes longitudinales y oblicuos sin llegar cortar).
Reservamos.
En una sartén, con una cucharada
de aceite, sofreímos las almendras y las hojas de perejil.
En un mortero incorporamos 5 hebras
de azafrán, echaos el sofrito anterior sin aceite, y machacamos hasta conseguir
un majado, que incorporamos al guiso una vez haya terminado. Damos un toque de
comino.
Con la sartén bien caliente (muy
importante), echamos un poco de aceite, ponemos la sepia en la sartén con la
parte del corte hacia abajo hasta que coja color (y no mucha cocción), damos la
vuelta y acabamos de hacer.
Emplatamos comenzado por el guiso
y colocamos encima las tiras de sepia que hemos marcado en la sartén.
Servir caliente y a disfrutar.
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